domingo, 28 de noviembre de 2010

"Sierra+Spa: Hotel Aracena Park"












 Ahora que ha llegado el frío, y se acercan las Fiestas Navideñas, qué mejor lugar para pasar unos días, que en un  hotel en la sierra.

Eso es lo que hecho este finde, y ha sido una gozada!
Os cuento:

Nos trasladamos a la pequeña localidad de Aracena (Huelva), en el parque natural "Sierra de Aracena y Picos de Aroche", precioso pueblo blanco, donde está situado el establecimeinto del que voy a hablaros, el "Hotel Aracena Park & Spa", un cuatro estrellas de 90 habitaciones.


Para introduciros un poco en el lugar y el ambiente del entorno del hotel, deciros, que el pueblo de Aracena es famoso, por su enclave natural, donde podréis realizar diferentes actividades, disfrutando en plena naturaleza.
Como practicar senderismo rodeados de castaños, encinas y alcornoques centenarios, rutas a caballo... visitar su cueva, llamada "Gruta de las Maravillas", esculpida por el agua tras el paso de los años, donde pasaréis una jornada mágica.
Además, el pueblo es tan bonito! sus callejuelas, las plazas, las casas blancas y el castillo en lo más alto...

Degustar su rica gastronomía, es otro de los alicientes del lugar, como el jamón ibérico de Huelva, las setas, entre ellas los gurumelos que son exquisitos, y sólo se recojen en esta zona, las carnes ibéricas a la brasa, las gambas de la costa, acompañado por una copita de vino de la casa, los postres típicos de castaña...y ya paro, que se me hace la boca agua!

También podéis ir de shopping en sus tiendas típicas, y hacer acopio de productos ibéricos, deliciosos quesos, pasteles, artesanía de cerámica...

El "Hotel Aracena Park&Spa" cuenta con nuevas instalaciones, abrió sus puertas hace unos 3 años.
Está ubicado en lo alto de una montaña, mirando hacia el pueblo y su castillo.

El hall es precioso, muy grande, y se abre hacia el bar, donde podemos ver al fondo una espetacular cristalera con vistas magníficas.

Las habitaciones son cómodas y muy acogedoras, los baños modernos y amplios.Podéis elegir entre estándar, suites, junior suites, y villas.
Estas últimas son ideales para familias, y para los que quieren disfrutar de un alojamiento rural, pero con las comodidades y servicios de un hotel.

Después de un largo paseo o una jornada de senderismo,  qué mejor opción, que relajarte en su moderno Spa; ofrece circuito, masajes y tratamientos de cabina.
Estos últimos no los probé, pero el circuito y un buen masaje merecen la pena, la verdad...

También dispone de una enorme piscina exterior, con tumbonas y bar (para el verano claro).

Su restaurante es magnífico, podréis probar las especialidades de la zona con un servicio exquisito.
El desayuno  bufet es de buena calidad y variado, es espectacular tomarlo contemplando las vistas al castillo y al  pueblo, mientras te comes una tostada de pan serrano con aceite de oliva y jamón pata negra por encima...todo un lujo!

Tiene un Pub estilo inglés, por si queréis tomar una copa por la noche, su ambiente es muy bueno.

Ahora están organizando los eventos de Navidad y Fin de Año, que por lo que he podido ver, no van a estar nada mal...con paquetes muy interesantes.

En resumen, se trata de un hotel precioso, que ha integrado perfectamente en su arquitectura la calidez de la sierra con la modernidad.Es perfecto para escapadas.

Además es único, ya que por los alrededores, hay hoteles pequeños de menor categoría y casa rurales, pero ofrecen menos servicios.

Personalmente me ha encantado, estoy deseando volver!

jueves, 25 de noviembre de 2010

"Por qué lo llaman zumo, cuando quieren decir Tang!"

Cada vez que salgo de la habitación del hotel, hacia la sala de desayunos, me voy preguntando por el camino: "¿habrá zumo de naranja natural?"

Y es que últimamente, algunos se están apuntando a la moda de poner dispensadoresde zumos de varios sabores, y ninguno recién exprimido, todos de bote (eso los mejores) y otros directamente Tang!...zumos aguados que no saben a nada; después hay otros que van de listos, y te lo presentan en jarras de cristal, para que parezca del bueno,
ya que estás ahí, haces el intento y te sirves un vaso, y cuando lo pruebas...en mi caso, y en el de muchos otros clientes, tras el primer trago dices: "¡ésto no hay quién se lo tome!", y lo dejas enterito encima de la mesa...y si miras a tu alrededor no eres el único; total, que acaban tirándolo a la basura; no os parece absurdo  desperdiciar alimentos, con los costes que tiene y lo que representa...y encima el cliente sale descontento, no se dan cuenta que no nos gusta!

y  me pregunto: ¿tanto les cuesta a los hoteles comprar naranjas a granel y preparar zumo?

El proceso, no puede ser más sencillo, me preparo muchos en casa, como todo el mundo, vale que con un melocotón es complicado, jejeje, pero una naranja... si han sido diseñadas para ser exprimidas!

No me gusta generalizar, hay establecimientos en los que encuentras zumo recién hecho, y productos frescos de primera, y algunos tienen  hasta de varias frutas, y te los preparan al instante si lo pides; incluso en hoteles pequeñitos y de menor categoría lo incluyen en su selección de productos.

Antes alojarte en un  4 o 5 estrellas, era garantía de calidad, pero ahora parece que están cambiando los estándares, y volviendo atrás en detalles como el que planteo; sitios que antes lo servían, se han pasado al zumo de bote o de dispensador con grifo, que además todos tienen el mismo color, a veces no sabes ni lo que estás bebiendo, si melocotón, multifruta, naranja, pomelo...

Sino pueden  prepararlo, propongo que den opciones, como poner un exprimidor con naranjas, y que todo al que le apetezca, se haga el suyo, igual que el tostador, ¿no? para el que tenga tiempo y prefiera el natural ; aunque reconozco que sería algo engorroso, la verdad..., y si vas con prisas, ni te lo planteas.

Es más, teniendo en cuenta lo que pagamos por el desayuno en un hotel, deberían incluirlo sí o sí.

¿Qué opináis? ¿cuáles son vuestras experiencias sobre el tema?
Yo digo:

" ¡Zumo de naranja natural YA! "

martes, 23 de noviembre de 2010

"El Hotel es el viaje: Meliá Gorriones"

Me gustaría comenzar una serie de entradas, dedicadas a hoteles que merecen ser visitadados por el hotel en si, sin tener nada que ver el destino del viajero; aquellos que son especiales, y alojarse en ellos transmita sensaciones diferentes e inolvidables a sus huéspedes;
hoteles que nos cautivan, donde merece la pena viajar sólo por vivir la experiencia de dormir allí unos días.

Podría haber comenzado,con un hotel categoría cinco estrellas o gran lujo, de los que sólo mirando sus fotos nos hacen soñar por un momento, pero no se trata de eso, quiero contaros mi experiencia en un Hotel como Meliá Gorriones, ubicado al sur  de Fuerteventura, sin duda la isla más salvaje y agreste de las "afotunadas", con sus paisajes volcánicos, que presume de tener las mejores y más extensas playas de arena blanca del archipiélago canario; este cuatro estrellas superior, ofrece a sus visitantes un sinfín de sensaciones, que me gustaría contaros...

Es diferente, por su inigualable ubicación, se alza en una duna, vigilante, mirando al mar de la magnífica Playa de Sotavento, paraje natural protegido, con kilómetros de fina arena blanca, y el turquesa Océano Atlántico, que entra y sale a su antojo al ritmo de las mareas, formando lagunas de agua salada, que cambian el paisaje cada época del año, y cada hora.
Pasear por esta playa y respirar su aire puro, contemplando el paisaje de volcanes al fondo, que es casi lunar, es una pasada!!! te hace sentir pequeño...no sé, esta playa tiene algo especial, y lo digo yo que por suerte vivo en la costa, y puedo ver el mar en muchas ocasiones...sí, definitivamente esta playa engancha.

Importante también, es el equipo humano que trabaja en él, desde los camareros, metre, limpieza, recepción y así escalando hasta la dirección, son todos estupendos.

Recuerdo la primera vez que fuí,(como para no acordarme) me caí en la sala de desayunos, y salí volando con plato en la mano y todo, y me atendieron genial; qué vergüenza pasé, madre mía!!!, la sala estaba llena de gente como es normal, y va y me la pego, los bollos volando y yo detrás; sé que había tres escalones, pero yo no bajé ni uno solo, me tiré de cabeza directamente al suelo, no sé cómo, pero lo hice; me rompí un dedo de la mano y la rodilla se me puso como un balón...y encima sola, estaba trabajando en la isla.

Pero, no repitáis mi hazaña, no hace falta llegar a este extremo para que os traten bien...jajaja!
Después de esto, podía haberme llevado un mal recuerdo, y todo locontrario, he vuelto muchas veces más, tanto de vacaciones como por trabajo.

Cuando llego,  el cansancio del viaje desaparece, sólo con ver la maravillosa playa cuando te vas acercando, se me pone una sonrisilla en la cara...y si hablamos de sus instalaciones, ya ni os cuento! son geniales, grandes piscinas, buenos restaurantes y comida de calidad, jardín tropical, bar en la piscina con terraza cubierta, otro bar chill out precioso (Gabi Club) con camas balinesas...tienen hasta un pequeño observatorio con un telescopio, para ver las estrellas, esto me encanta!, es otra experiencia más y muy divertido.

Pasando a las habitaciones, decir que son muy amplias,todas tienen zona de estar con sofá, tele de plasma y escritorio, zona armarios vestidor,grandes baños y terraza.
Para los que quieran darse un lujo, además de solicitar vistas al mar, tenéis como opción las suites The Level, con servicio especial y más lujosas (amenities, decoración, jacuzzi...), y para los que queráis estar muy cerquita de la playa, tenéis las Casas del Mar, que son suites muy acogedoras en la zona más baja del complejo.

En definitiva, si os apetece desconectar, y descansar en medio de la nada, alejados del mundanal ruido (ya que la población más cercana es Costa Calma y está a tres kilómetros) , donde hace buen tiempo todo el año,sin meteros mil horas en un avión, en un enclave priviliegiado, y dar largos paseos frente al mar, este es vuestro hotel, ya que la tranquilidad y el entorno te llenan de buenas vibraciones, y regresas a casa con energías renovadas.


sábado, 20 de noviembre de 2010

"Buenas tardes, tengo una reserva a nombre de..."

Últimamente pierdo la cuenta de cuántas veces repito la misma frase, "Buenas tardes,tengo una reserva a nombre de...", es como un "déjà vu" o como "el día de la marmota", ya lo digo por inercia; pero a pesar de que se repite esta situación, una y otra vez, cada vez que llego a un hotel, últimamente me he parado a pensar sobre ello, y me he dado cuenta de que siempre es diferente, no sólo porque sea un lugar u hotel distinto, sino porque las personas que te reciben lo son.

Qué opináis?, para mi es primordial que te reciban amablemente con una sonrisa, y no ocurre tanto como me gustaría.No entiendo como una persona que trabaja en un departamento de atención al cliente, no hace lo que se supone que debe hacer: "SONREIR", es sólo eso, es muy fácil, no hace falta que nos hagamos amigos.

Yo, por ejemplo, tengo que reunirme con personas diferentes y clientes a los que no conozco de nada o muy poco, y no importa mi estado de ánimo, siempre estoy al pie del cañón aunque no me apetezca o no me guste mi interlocutor.

Pero bueno, esto lo tengo superado, no creo que vaya a cambiar, es así, al menos suelen ser correctos; pero algunos deberían ser más profesionales, ya que para un puesto de trabajo de cara al público, una sonrisa hacia el cliente es fundamental.

 

No me enrrollo más con este tema, voy al grano, y sigo por dónde comencé.

Lo que realmente me está empezando a preocupar, es que cada vez que repito la frase: 
" Buenas tardes, tengo una reserva a nombre de...", no ocurre lo mismo, pero no sé si es una mera anécdota, mala suerte o buena suerte en algunos casos.

Me explico,
Siempre la repito (la frase), cuando llego a un hotel a hacer el check-in , y creo que lo hago igual, pero no es así, empiezo a ser consciente que cuanto más simpática soy con el personal de recepción, peor habitación me asigna, por quéeeeeeeeee?

Me estaré volviendo loca???os prometo que es verdad, que cuando soy simpática ,doy conversación,les digo lo que me gusta el hotel y que siempre que voy a ese lugar me alojo allí, me dan una castaña!!!,y cuando llego cansada, sin ganas de historias y no doy conversación, me dan una habitacón magnífica!!!,con vistas, albornoz, amplia...


No es broma,escribo sobre ello, porque creo que no es pura casualidad (o al menos pienso que no puede serlo tantas veces, jejeje), podría hacer una estádística sobre ello, tengo una experiancia de años...y muy buena memoria.


Pero claro, cómo probarlo, cada vez que llego a un hotel no soy consciente de ésto, hasta que llego y entro en la habitación, entonces pienso en lo ocurrido en el lobby, y empiezo a atar cabos, y a analizar en mi cabeza " he estado simpática?o he hecho la entrada sin más?"

A partir de ahora voy a tener que empezar a comprobarlo, a ver si me acuerdo..., porque como llego tan cansada o con tanta prisa, no soy consciente de la situación en el momento en el que ocurre, pero lo conseguiré!, y demostraré que la amabiliadad del huésped en la recepción, es inversamente proporcional a la castaña de habitación que te asigna el recepcionista de turno y viceversa.

Así, que ya os íré contando si se cumple mi nueva teoría, hasta la próxima....

viernes, 19 de noviembre de 2010

"Hacernos felices, cuesta tan poco..."

Comienzo mi nueva andadura como blogger, escribiendo sobre algo que me hace un poquito más feliz desde hace tiempo y que forma parte de mi día a día.


Veréis, viajo mucho por motivos profesionales y para mi estar fuera de casa es lo habitual, siempre hay una maleta a medio hacer o deshacer por casa...pero algo ha hecho que lo lleve mucho mejor, esto  ha sido  posible gracias a la cadena Hesperia.
Cada vez que me alojo en uno de sus hoteles urbanos, puedo solicitar por el mismo precio de la habitación, lo que ellos han denomidamo "PINK ROOM", suena bien verdad...pues sí las chicas que viajamos solas estamos de suerte.

En cada hotel han designado varias habitaciones en las que han incluido algunos detalles que te hacen sentir especial y sobre todo muy cómoda.


Lo primero que ves cuando entras en la habitación es una cama con muchos cuadrantes blancos y blanditos,con sábanas del mejor algodón donde poder leer alguna de las revistas de moda que te dejan sobre la mesa, y sobre la cama también una cesta con un albornoz,unas zapatillas y un minineceser con todo lo que necesitas y que nunca te ponen en las amenities de una habitación estándar, como desodorante, bálsamo de labios, una lima, bodymilk,discos desmaquilladores,productos de higiene íntima y alguna cosita más, pero esto no termina aquí, en el armario puedes encontrar una plancha y la tabla, perchas para faldas, en el baño tienes la tan odiada y maldita báscula,cepillo del pelo, espejo de aumento y un secador potente (no como el de algunos hoteles que parece de juquete), y para terminar en el minibar además de zumos y refrescos, puedes encontrar actimel, barritas special k, un antifaz frío para descongestionar los ojos, todo esto del minibar previo pago claro, pero no me digáis que no es estupendo!
Llegas de la ofi o de una reunión reventada, y lo que te espera después de una buena ducha es tirarte en albornoz, sobre la cama mullida repleta de cojines, a leer una revista...mientras esperas que te traigan la cena a la habitación.

Y además añadir, que 1 euro del precio de esta acogedora habitación, se destina a la lucha contra el cáncer de mama.

Ayyyyy...qué poquito cuesta hacerme feliz, a ver si las demás cadenas toman nota, y podemos disfrutar de servicios como estos en otros hoteles muy pronto.